UNA VIKINGA QUE LLEGÓ A DONDE NINGUNO PUDO. 201

                                         

                                           UNA VIKINGA QUE LLEGÓ A DÓNDE NINGUNO PUDO

GUDRID THORBJARNARDÓTTIR

La matriarca vikinga que colonizó América hace más de mil años

 

ADVERTENCIA: Ciertamente, la referencia no suele aparecer en mis libros pre-escolares de historia, pero la voy a seguir usando. Su mundo está cerca de ser sólo un recuerdo por mi asperger.

 

Lo que te voy a contar te dejará pelos blancos, se te pondrán fríos los dedos de los piés, perderás hasta cuatro onzas de peso y, por si fuera poco, un subidón de la presión arterial, así que tomáte algo para el pecho, ya que no es fácil leer su nombre, que es como pronunciar agudezas peligrosas para la salud y, si se respeta la grafía original encriptada este es, Guðríðr Þorbjarnardóttir, Gudrid para los admiradores, una güera híbrida con el pelo tan brillante como una llamarada brillante a la luz, chapaleando en el mundo oscuro, asimétrica y cibernética en su mundo distópico, que es como ver a la Venus de Milo sólo que a lo bestia y sin comerse las uñas, pero cuando alguien se mira tan bien es que ha de tener malas costumbres, que es de quien te relacionaré como lo hice yo anoche con ella a solas en la paz de la madrugada con sentimientos tan poderosos como los calambres estomacales y, con voz ausente para calmarme la mente, pues encuentro con temor de equivocarme bajo las sábanas a media noche, que el modelo vikingo es masculino, negrófilo y, no suele referirse a las faldudas, puros machos cerreros palomudos, rubios -canches se llaman aquí, cheles en El Salvador, machos en Costa Rica, fulo en Panamá, güeros en México, mono en Colombia, bermejo en Ecuador, payo en Perú, loiro en Brasil, catire en Venezuela,- ojos azules, barbudos, greñudos, pelo alborotado sobre los hombros o con peinados y cortes de pelo que ahora copian los que quieren llamar la atención, fortachones fornidos, anchos y panzones llenos de cerveza y vino, kusha creo que también, rellenos hasta la línea de flotación, altos o muy altos, de mirada azul feroz, salvajes, despiadados, sanguinarios, especialistas en churrascos humanos, varones de infanteria, chulos los cabrones y, en barcos rápidos de tingladillo con clavos de cobre que los hacían más livianos, más rápidos, más eficaces y mortales, que cortaban el agua con mayor facilidad pues habían inventado la quilla que los hacía más estables y, podían ir para delante y para atrás, livianos de diseños especiales muy resistentes y, cargados de guerreros podían navegar hasta en un metro de profundidad. Se orientaban con el sol y las estrellas y en la niebla lo localizaban con la piedra solar  que fijaba la posición del sol con un grado de diferencia. Barcos de guerra con caparazón quintinosa y mascarón de proa en forma de dragón de fauces abiertas casi siempre, que se podían desarmar con gran facilidad para esconderlos, que además tenían vida y personalidad propia, transportando por las carreteras acuosas a los que asaltan las costas de Europa occidental. Llegaron al Mediterráneo, a Rusia y el norte de África, descubriendo y colonizando tierras que se les cruzaban en sus caminos sin que ellos lo quisieran. De ahí el nombre de vikingo que quiere decir saqueo. Aparecían de la nada. Sí, saqueo, matanza, violaciones, chamusquina de poblados. Tierra arrasada. La siniestra ingeniería de la esclavitud. Todo como pago para mantener el faro encendido vaciando su vejiga a donde iban. Desde las walquirias nórdica hasta primeras ministras, diputadas y presidentas, empleadas públicas, peluqueras y, desde las legendarias doncellas hasta otras pioneras de la política de género socialmente progresista, -hasta la sueca Greta Thunberg,- el mundo nórdico tiene una longitud histórica de varios kilómetros de mujeres fuera de base y nadie personifica mejor esa herencia milenaria que Gudrid Thorbjarnardóttir, la exploradora nórdica reconocida en la ONU y la PDH como la viajera lejana,embajadora de paz, nacida en la península de Snæfellsnes en un fiordo pequeñito de Islandia ay por los 974 de un 21 de diciembre en pleno solsticio de invierno, con nieve y frío hasta las nubes y casi total oscurocidad, doncella de Laugarbrekka, hija auténtica sin mancha y con arrugas poray, del vikingo Porbjörn Vifilsson, -cuyo esperma la hizo rubia tirando a peliroja y ambidiestra y con ojos libidinosos,- un esclavo liberado, que era el cacique local de Thorbjorn con noventa por ciento de paciencia y diez por ciento de cocción, porque no se le conoció madre, talvés el Espíritu Santo ya andaba haciendo travesuras por ahí. Según mis últimas cavilaciones creo que su nana fué una trolla que poray abundan y son rechulitiyas y les hacen aziguantamiento a los hombres desprevenidos. Así pasó su infancia en casa como niña buena con sus hermanos y rebaños de ovejas que montaban ellos, interesada por el mar y el grito de las hormigas, pues no con tanta frecuencia allegaba un barco que venía a la isla, su isla, en la que Leif Ericksson entregaba la comida por el Panda Express de ese entonces y, ella se preguntaba de dónde venía ese señor y dibujaba con un palo sobre la arena el mapa que ella imaginaba de su procedencia para irse con él y poder regresar, así que sin más, se coló en su nave con el alma y la mente rota con tanta necesidad como tener una hemorroide, pero la encontraron por el olor a niña y no pudo escapar aunque trató de esconderse. Como el zodíaco me ordenó entrarle, debo hacer algo, así que aquí te voy San Pedro.

 

Quería hacerle una canción de amor,

pero mi musa con celos hasta el pescuezo 

no me dejó por tanto calor

 

Trotando en el camino de la Rana, hoy es viernes para el futuro en el acto que dedico a PepaPig y a Matrix Resurrection, pues su historicidad abunda como las zompopas culonas de mayo y se cuentan en libros además de las Sagas Vinland, en Gudrid the Fairde Maurice Hewlett, Nornespind de Gert Maarløw Nicolaisen, God's Daughter de Heather Day Gilbert, The Sea Road de Margaret Elphinstone, Beyond the Northlands de Eleanor Rosamund Barraclough profesora asociada de historia y literatura medieval en la Universidad de Durham. Aparece en la serie de manga Vinland Saga de Makoto Yukimura que recrea la historia de Thorfinn Karlsefni y su viaje a Vinland. Quizás una de las referencias más enredadas es la de la novela de comedia y ciencia ficción de Harry Harrison The Technicolor Time Machine, en la que Gudrid es en realidad una actriz que se enamoró de un vikingo del siglo XI que resulta ser el mismo Thorfinn Karlsefni y fue abandonada por su equipo de filmación después de hacer un viaje en el tiempo. Pero su conocimiento se relaciona con dos leyendas nórdicas, La saga de Erik el Rojo que también se la llama Saga de Thorfinn Karlsefni y Snorri Thorbrandsson, -por los otros dos que intentaron quedarse a vivir en el nuevo mundo para ellos, pero les fué de los pelos al guerrear con los skraelingar y, tuvieron que abandonar el poblado- y, La saga de los Groenlandeses que fucionadas son las Sagas de Vinland, que narran viajes hacia las periferias de América del Norte poray del año 1,008 y, los nórdicos llamaron a estas tierras Vinland, tierra del vino por las uvas silvestres que crecían allí para hacer guarito santo con el que se ponían de cara al sol. Las sagas se registraron en la Islandia de los 1215 en el siglo XIII, más de dos siglos después de que ocurrieran los eventos que describen, y sus relatos se transmitieron en forma oral, que es la más rica, recontados y remodelados a medida que pasaban de de boca a oreja, con elementos fantásticos al estilo de Juego de Tronos, -dragones, trolls, muertos vivientes, enanos, curanderos, mediums y mediums babosos, soñadores, maximones, videntes, profetas, brujas, fantasmas, sanjorines, walkirias,- las principales fuentes para las actividades nórdicas en los márgenes del lejano oeste del mundo medieval y, gracias a las sagas los arqueólogos encontraron evidencia material de esos viajes. No me olvido de Bjarni Herjólfsson, que fue el que primero le echò un ojo a Terranova, Labrador e Isla de Baffin, haciéndole temblar el párpado a Leif Eriksson para que fuera a desforestar  para llevar maderas para Groenlandia, cuando ahora los bosques se queman a un ritmo de 2 canchas de fútbol por minuto y sin cortafuegos, que es la peor noticia desde que Nixon renunció, el que no cobraba sueldos, ni retrasados, ni en retroactividad. Ya son las 12, mañana le doy otro rato, pero no le dé gusto a la OPEP, ahorre un vatio.

Posiblemente cambien los detalles, la esencia no tanto

 

Cuando los planetas estaban alineados porque todo está conectado, reciencito Gudrid, con braquicardia, cayendo duro con su mirada azul de aspecto ceñudo llevando el corazón bajo la manga cuando se estaba viviendo la quinta extinción, acababa de celebrar su fiesta de quince años en 879 y, su presentación en sociedad, según lo publicó Prensa Libre y, el ambicioso de su tata mandó al cuerno una propuesta de matrimonio para ella, porque el padre del chico era un esclavo y sólo le ofrecia unas pocas gallinas, como que él no lo hubiera sido, así que un poco cabreada, con su roca de tropezadero con el marinovio con su cara de rata ahogada queriendo consumar su unión a lo Guerra de las Galaxias, -a la fuerza y por el lado oscuro,- con el corazón latiéndole como redoblante en la Jura a la Bandera, y con sus palabras tropezando en las amenazas sobresaltadas porque todavía no tenía la maldad suficiente, así que con obediencia instintiva y mente reactiva, con toda la decencia del caso como suele hacerse en esos casos, que era como enfrentarse con el mismísimo diablo, le preguntó subiendo su voz dos octavas con gemidos de ira y sin embeleso:

-“¿Estás de acuerdo o quieres aprender a respirar por la nuca? 

Y acto seguido, con efecto de aerosol en un enfrentamiento del miedo a la muerte le zampó tres puyones, pues lo quizo dejar estéril para siempre, se puso pálido como una barra de mantequilla lo dejó más infectado que un grano suporoso y casi lo manda con pase directo sin escalas al Valhalla -del nórdico antiguo Valhǫll, salón de los caídos dirigido por Odín,- y, lo dejó tan aterrorizado como una rata en una tranpa y, como cada condenado día salió por la puerta de atrás huyendo cargada de sus manías femeninas porque tenía sueños que podían matar, emigró con su tata a Groenlandia mojados y sin papeles, y como lo afirma en su canción Bruce Springstean: 

-“no hay retirada nena, ni rendición,”- 

para unirse al nuevo asentamiento vikingo de Erik Thorvaldsson, o sea el hijo de Thorvald, Erick el Rojo para la comunidad sololateca, el primer colono de Groenlandia que fué con una treintena más, la mitad de los cuales murió durante la travesía agobiados por el calor, el hambre a pesar de estar raspando el fondo de las ollas, la sed y sin mujeres y con las calamidades omisas del mar abierto. Por ese entonces mejor se casó con Þorir el Noruego con sus sus nalgas planas por exceso de silla y con el rostro blanco como queso crema, que fué parte de su fracaso porque era especialista en tener las cosas al día y, como la mar es muy cabrona y en especial la del Norte, muy golpeada la nave con su vestimenta de madera y con la línea del plimpsol dos cuartas por debajo de las olas, casi naufragados azotados por olas de cinco metros, y la bacinica de madera ya no se daba abasto para sacar las aguas, porque estaban haciendo aguas, bueno el navío, no ellos, y la profunda violencia del oleaje había circuncidado el mascarón de proa galvanizándolo con la tormenta eléctrica y la lluvia franca de pasos susurrantes y, tocando piedra con abanicos de burbujas de espuma sanguinolienta, cada uno velando por sus propios zapatos como en el Titanic y, cuando estaban a punto de caramelo reclamados por Ægir -un jotun y rey de los mares, la personificación del poder del océano.- cuando ¡ZAZ! los rescató Leif Eriksson, -que tenía las agallas de un conejo,- iyendo en alta mar y con muchos redaños dándole zarpazos al oleaje cruzado. Los 15 supervivientes de la travesía fueron rescatados de un pedrusco cercano a Groenlandia con los dedos de los pieces purpúreos e hinchados, algo cerúleos, con la piel tan gris como el cielo pues hay cosas peores que tener miedo y, fueron conducidos a Brattahlid, el asentamiento de Erik en la colonia Brattahliö, en la parte suroeste, no lejos del fiordo Tunulliarfik que la protegía de las tormentas oceánicas y, ahi se conservan restos arqueológicos de aquella granja, donde fue levantada la primera iglesia cristiana de América. Ahí le hizo ojo pache con soltamiento de jaurías al noruego llamado Thorfinn, Thorir para las patojas, que les permitió unirse a su excursión, para huir del tata del patojo y, en un tres por dos se casorió con él con la anuencia de Halfdan, -porque Þorir fue tragado por las olas. pero también éste último murió de pasmo en el invierno siguiente durante la hambruna que afectó a la Colonia, por el alza de precios y el extrafinanciamiento con congelamiento gubernamental de los mismos en una fuerte depresión económica en los supermercados. Turbio como el café caliente. 

 

“Quaeque ipsa miserrima vidi,

et quorum pars maqua fui”

Cuántas cosas horribles ví y, 

en cuántas de ellas participé.

Virgilio

 

¿Por qué don? Porque “mientras mi guitarra llora suavemente,” Gudrid modeló el ejemplo de aquel raro y complicado período de transición de amancebamiento cristológico, cuando acababa de quedar viuda de Thorir en el crudo invierno de goma y eso a los aziguambadores adoctrinadores les cayo como aro sobre rueda y eso siempre les servía para el mareo. Y ella con toda la gana y sin verosimilitud les dijo: 

-“Aún tengo que hacer cosas peores.”

 

Entre mejor se vea, más problemas oculta

 

Nunca fué frijol limpio. Con una mano dando y con la otra quitando, no me asusta, pero no me sorprende pues durante el banquete de iniciación del ciclo lunar, una völva bombastic con side eye, que es una sacerdotisa vidente llamada Þórbjörg lítilvölva, o sea Thorbjörg la pequeña völva, vestida de manto negro, capucha de piel de cordero negro, guantes de piel de gato, botas altas de cuero de reno y báculo, con criminal offensive solicitó la colaboración de las mujeres para cantar juntas el varðlokur, el canto con el que se invoca a los espíritus buenos y que forma parte del seidr, para romper calamidades y que funciona pues ella era la hechicería nórdica de carácter chamánico. La única que los conocía era Gudrid, que los había aprendido de niña, aunque ya andaba jodida con el cristianismo se negó a participar, pero convencida que el otro Dios no actuaría porque al séptimo día de la creación se acostó a dormir y todavía no a despertado, la convencieron porque el ritual sería beneficioso para todos y no le afectaría en sus creencias de a cinco. Gracias al varðlokur, Thorbjörg recibió la influencia de los espíritus buenos, vió el futuro y profetizó que la llegada de la primavera acabaría con la hambruna que sufrían y así mismo ocurrió y,a Gudrid le auguró una larga y próspera vida. Próspera no sé, bueno sí sé, pero no tan larga sí fué y como lo afirma E. Costello: “lo que importa es la voz del que narra, no la narración en sí,” aunque sé lo inútil e infructuosa que resulta cualquier palabra mía, así que ni me quejo porque no hay una cadena de mando ni pa´rriba, ni pa´bajo. El error era Él pronunciando orinoceno, porque el adoctrinamiento cristiano a la fuerza en Escandinavia empezó en el siglo VIII, en el caso de Noruega, durante los reinados de Haakon el Bueno -que había sido educado en Inglaterra y que de bueno no tenía nada porque le vendió el reino a la religión- y su sucesor Harald II, si bien hubo altibajos y otros reyes trataron de retornar a sus Dioses verdaderos y no a los extranjeros de madera que querían copar el mundo entero. Olaf I impuso el cristianismo a sangre y fuego, derramando varias cisternas de ese líquido colorado viscoso con olor a plomo, siendo durante su mandato cuando la cruz llegó a Groenlandia y se chingó el amor eternamente. Los odiaban tanto como a la fiebre bubónica.

 

“Solía pensar que mi vida era una maldita tragedia,

y ahora me doy cuenta que es una comedia”

Arthur Fleck

 

La voz de la voces me dijo que como “ya nadie es civilizado” que la falta de cariñito sicalíptico de Gudrid era porque ya estaba bien kilometrada, -como abeja chupando néctar de las flores porque no era una majareta aunque movía los labios sin sonido y con la cara gris, -se casó con Thorstein Eiriksson, hijo de Erik el Rojo y hermano menor de Leif Erikson, el primer europeo que machucó las Américas. El trato era que ella con toda su concupiscencia mandaría porque tenía los calzones pesado y pasados por agua, pues sólo le  interesaba la riqueza, bueno no la de él, sino del oro y joyas. Se fué con su nuevo marido a búscar el cuerpo de su hermano Thorvald a Vinlandia -en la Tierra de las Piedras Planas en Baffin, en 1010,- el que valió chicharrón con los que ellos llamaban skrælingar que eran pieles rojas, que en su idioma nórdico significa bárbaro o salvaje, -imágínense quién llamando a quién,- en un combate a mano armada contra Cuerno Afilado el ominoso con su enorme ojo sin párpados y a punto de ensuciarse en los calzones, de un tajo le cortó la tráquea después de media hora luchando y chorreando sudor agrio, lo dejó a punto de ebullición en el asentamiento vikingo en la zona costera del actual Canadá en la punta de Terranova, pues las cosas malas se culivaban bien ahí, en donde están los restos del yacimiento arqueológicos del asentamiento vikingo en L'Anse Aux Meadows, fundado por el mismísimo Thorvald, hermano de Leif, el poblado de Leifsbúöir, en donde los gringos descubrieron restos de varios edificios nórdicos en la década de 1960. Cada vez es una víctima más y como lo dijo el general Reyes “aquí los morimos pero no los rendimos.” Thorvalddespués de haber pasado la Laguna Estigia acompañado de dos hermosas walkirias, Surjmean la Pálida la viuda de Leif quiere amancebar a Gudrid con Sigurd el Brusco, heredero de Halfdan, pues esa carne de alta gama no se puede desperdiciar, pero ella le hace resistencia pacífica y huelga de brazos caídos apretando una nuez entre las rodillas para que no se las abran y, decide fugarse antes de la ceremonia de bodas, pero unos chuchos la evidenciaron y, aunque lo intentó no se pudo y no le quedó más que acceder al casoriamiento y, cuando el macho la quiere montar a pelo, le zampa de puñaladas con el corvo que tenía entre el calzón y se huye, pues el tiempo no andaba de su lado, pero como Odín es muy cabrón le tapona las heridas a Sigurd con cera de abeja y éste decide perseguirla en su barco, pues cree que Thorfinn la quiere amancebar pues también ella es de los pueblos del mar y, como hay almas bondadosas que velan por los oprimidos, Thorfinn y Leif le echan una manita y se la llevan en su viaje comercial buscando volver al mapa con el aire opaco y con olor a verde. De ahí fueron a la Tierra del Oso y a las de los Bosques de Marglandia en Labrador, al Cabo de la Quilla además a las Riveras Maravillosas y el Fiordo  de la Corriente en donde habitaron un tiempo, pero se dividieron y ella se fué al sur hasta Hope la Exclusa Terrestre donde se toparon con los nativos pieles rojas del lugar, los beothuk y comerciaron con ellos, pero luego del invierno volvieron y los vieron como enemigos y se rompieron toda la madre, así que los bravos vikingos agarraron sus tanates y huyeron como chuchos apaleados, pues eran menos duros de lo que creían, pero ella no pudo porque le había  crecido la panza pues ya tenía en el horno un su muchachito y, encontró un vikingo muerto, así que tomó su espada y les hizo frente y, al verla tan encabronada defendiéndose, también se desperdigaron como palomas asustadas por los truenos, pero primero se cargó a unos cuantos y en celebración del acontecimiento, como las walkirias, de hizo un corte en la chiche izquierda para que le quedara de recuerdo. Así, exploraron muchos lugares antes de regresar a Groenlandia. Y usted no pierda las hermosas oportunidades de quedarse callado.

 

Se mantenía agarrada del mundo con las uñas

 

Con psicopatía artrócica con la energía oscura que no se acaba y se reproduce en su estructura hasta el Big Cranch y, sin que le importe un salami, la Saga de los Groenlandeses es la principal fuente de infomerciales, y así a los poetas y cantantes que le eran estorbosos les daba tratamiento especial purgando enemas y por eso como todo es negociable, su alma viajera no la dejaba en paz con el peso familiar del miedo, pues aprovechando el prestigio de Karlsefni y de sus hermanastros Leif y Porvaldr, para llenarse los talegos de riquezas, estando en Noruega les propuso a los hermanos navegantes Heydi y Finnbogi Simbol que fueran a Vinland y partieran ganancias fifty fifty de todo lo saqueado y, le pidió a Leif que le prestara su casa en el lugar. Cada uno llevaría un barco con treinta hombres y algunas mujeres para equilibrar el frío. Pero su mente retorcida le dijo que llevara más hombres por si acaso. Al allegar no cumplió su parte y no dejó que los otros habitaran la casa, así que tuvieron que contruir otra, pues le gustó la nave de los hermanos y la quería como se quiere una ambrosía y, los pasó al otro lado mientras dormían y se tronó a todos los que supieran de sus planes originales por eso y, al regresar, con mentiras de a cinco le dijo a Leif que la vengara por las ofensas no recibidas del otro grupo y, Thorvald los capturó a todos y ella que los tenía agarrados de las mollejas, ordenó que los pasara por el filo de las hachas, pero ninguno quizo darles mastuerzo a las mujeres, así que ella tomó un hacha y  les partió el espinazo. No contenta los amenazó con cortarles la picholita si decían algo y así terminó su sexto viaje y, regresó en la nave confiscada por las buenas y, me imagino cómo serían las malas entonces. Les dió los mejores regalos a los hombre para que mantuvieran clausuradas sus fauces. En Vinlandia todos sabían bien la historia con histeria, pero a su retorno, dijo: -si no vuelvo, regreso, Eiriksdótir se chompipió por sus andares en los terrenos en desarrollo y mantuvo la traición bajo el vestido, jurando que Helgi y Finnbogi se habían quedado en las tierras nuevas, pero Leif se enteró de los juegos de su hermanastra con toda sospecha y bajo tortura  a tres hombres los hizo confesar sus pecados como cura con poder de dicción y supo la verdad. Sólo dijo: 

“-No se lo merece.”

No la castigó pero le hizo lo peor en ese entonces que era maldecir a su descendencia lo que es más jodido, porque los otros no tendrían la culpa. Más cabronas ni la Suri, ni la Sandri. Durante un año participó en la colonización y aumento geométricamente su fortuna y la llenaron de halagos y reconocieron su alto desempeño mercantilista y así se ganó el título de reina de las mentiras a puro pulso.

 

“Podría ser muy malvada si me lo propusiera. Créeme”

Gudrid Thorbjarnardóttir

 

Con palabras confusas en la Islandia del siglo X, en una granja llamada Laugarbrekka en la península de Snæfellsnes, hoy Parque Nacional donde nacieron Bárður Snæfellsáss, héroe de otra saga fantástica porque es hijo de una humana y un troll y, el de Gudrid Thorbjarnardóttir, tal y como indica un cartel a la entrada al poblado, pero se me hace que de repente, como no se sabe quién es su máma Gudrid es hija de una trolla y por eso fué tan cabrona con los cascos con el color opaco del peltre. La zona occidental insular es famosa porque allí se ubica el volcán del mismo nombre, por el que entran los protagonistas de la novela de Julio Verne,Viaje al centro de la Tierra. 

 

“Espero que la muerte tenga más sentido que la vida”

Arthur Fleck

sergiodeleonlopez

CONTINUARÁ...